Helena Taberna estará presente en la 70ª edición del Festival Internacional de Cine de San Sebastián, que arrancará mañana, viernes.
La directora Helena Taberna acudirá al Foro de Coproducción Europa-América Latina, con el proyecto de su nuevo largometraje de ficción, Nosotros / Us, producida por Lamia Producciones Audiovisuales e inspirado en la novela Feliz final, de Isaac Rosa. La realizadora, que tiene en su haber títulos como Yoyes, Nagore, La buena nueva, Acantilado o Varados, está muy satisfecha de poder asistir a esta cita. “Nos ha alegrado mucho estar en el apartado dedicado a la industria porque así la película empieza a conocerse y a sonar tanto para los programadores y seleccionadores de festivales como para la prensa”, indica Taberna, que ha coescrito el guion de esta historia junto a Virginia Yagüe.
‘Nosotros’. El amor como motor
“La última versión que le enviamos le ha encantado”, dice la realizadora en referencia a la reacción de Isaac Rosa. Nunca resulta fácil adaptar el trabajo de otro creador, de hecho, en algunos casos se han producido grandes polémicas entre escritores/as y directores/as y guionistas. En este caso, sin embargo, “ha ido todo muy bien, aunque le he sido infiel”, confiesa Taberna. “Es un hombre muy inteligente, sensible y cinéfilo que de entrada se sintió muy halagado de que una cineasta como yo quisiera llevar su historia a la pantalla”, agrega. Y recuerda que la novela “me entusiasmó”, aunque a la vez “pronto entendí que adaptarla iba a ser un reto muy grande”, debido a su estructura.
Ahí, en la estructura es donde las guionistas han centrado todos sus esfuerzos, en un claro intento de “generar una aproximación a la verdad” de la novela. Aquí cabe señalar que Feliz final, que en cine se titulará Nosotros, reconstruye un gran amor empezando por su final: la historia de una pareja que, como tantas, se enamoró, vivió una ilusión, tuvo hijos y peleó contra todo –contra ellos mismos y contra los elementos: la incertidumbre, la precariedad, los celos–, luchó para no rendirse, y cayó varias veces. Y cuando el amor se acaba, surgen las preguntas: ¿dónde se torció todo? En esta narración, los protagonistas cruzan sus voces, confrontan sus recuerdos, discrepan en las causas, intentan acercarse. Este relato es una autopsia implacable de sus deseos, expectativas y errores, donde afloran rencores sedimentados, mentiras y desencuentros, pero también muchos momentos felices. Isaac Rosa aborda un tema universal, el amor, desde los muchos condicionantes que hoy lo dificultan: la precariedad y la incertidumbre, la insatisfacción vital, las interferencias del deseo, el imaginario del amor en la ficción…
Sin duda, se trata de una apuesta fuerte de Helena Taberna, para quien el “encuentro creativo” con Rosa ha sido “muy bonito”. Uno de los mayores desafíos, cuenta, ha sido abordar la historia desde la igualdad, pero incluyendo “detalles” y “matices” que son tan importantes en esta historia, “y en mi cine en general”. Asimismo, la cineasta ha incorporado nuevas formas de contar, como el fuera de campo, o “el rostro sin palabra o la palabra sin rostro”, y sigue en su propósito de ir diluyendo las fronteras entre el cine de ficción y documental. “Me estoy atreviendo a probar cosas, a jugar; este es el juego de la vida y de la creación”, afirma.
Los protagonistas y el equipo
En estos momentos, además de continuar con la fase de producción y financiación de la película, seleccionada junto a otros nueve proyectos dentro del Foro de Coproducción Europa-América Latina, Taberna se encuentra centrada en dar con el actor y la actriz protagonistas del filme. “Esta selección la estoy llevando yo directamente porque tengo muy claro lo que quiero”, comenta, y subraya que está “muy contenta” con el equipo técnico y artístico que se está conformando en torno a Nosotros. “Me está gustando mucho, con algunos profesionales ya había trabajado y con otros no, pero siento que todo se está configurando de una manera muy lógica”. Eso sí, reconoce que le hubiera gustado empezar a rodar antes, pero “poner en pie un proyecto cinematográfico es costoso y más en estos tiempos”; aunque también ve el lado bueno de la demora, y es que “el tiempo hace que todo repose y afina las cosas”.
En cuanto a plazos, la realizadora de Altsasu cree que el rodaje podría empezar en primavera de 2023, “o si no, en otoño”. Del estreno aun no se puede hablar, es pronto, pero insiste en que hace películas “para que sean vistas”, y para que los espectadores “no solo disfruten, sino que se transformen”. En este caso, a partir de “una historia hermosa sobre el amor como motor esencial de la vida y su ausencia”.
En cuanto a la notable presencia de creadoras navarras en el Zinemaldia de este y otros años, la directora se muestra “ilusionada”. “He luchado mucho para que esto fuera una realidad, no solo de palabra, también con hechos, y es una maravilla confluir con estas cineastas. La mirada femenina está aportando mucho al cine; quedaba mucho por contar y aquí está”, termina.
Fuente: Ana Oliveira Lizarribar, Diario de Noticias